Diego empezó a usar un collar que compré en Tepoztlán con aspecto muy yogui. Cada vez que lo veo en cueros con el collar puesto, me río. Y los dos decimos: Namasté.
Me estoy despachando con unos apelativos que tenía guardados en algún lugar de mi mente. Cuando me dejo ser, no doy. Cosas del tipo: nenita, pichicha y semejantes. Formas que usábamos con mi hermana allá por los 90s. Cosas que les decía a mis muy amigas y amigos y ahora tiro descontroladamente.
Falta de Melita.
¿Qué le vamos a hacer?
Brindamos porque la angustia se desvaneció. Nos gusta.
Mucho chocolate y dulce de leche. Decimos: desubication. Leímos mucho mucho sin parar. Nos duelen los ojos.
Mañana será otro día.
Así las cosas.
Dinámicas.
1 comentario:
jajajajajaja casi lo unico que me hizo reir en el dia.
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