antes, cuando vivía en argentina, pesaba 3 kilos menos. antes, mucho antes era gordita. desde siempre. después de que nació simón a fuerza de esfuerzo adelgacé.
pero era todo ridículo: comía disociando los hidratos con proteínas, desayunaba media tostada (media tostada!), nunca comía nada dulce y supongo que vivía amargada (lo sé).
ahora como normal, hago gimnasia normal y soy normal. no soy flaca, tampoco soy gorda.
me gusta ser así.
normal.
1 comentario:
¿puede ser que un dia abras los ojos y estes a salvo de esta enfermedad? ¿te mires en el espejo y veas en lo que has quedado puro hueso y la cara demacrada?
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