miércoles, 20 de julio de 2011

Crónica de unas vacaciones familiares, Indianápolis 7

Y esto, como todo, está llegando a su fin. Madre y Pau cocinan (yo soy la lacra que de repente me rescato y lavo algún plato y/o utensilio, igual Giorgio me gana siempre en lacrez) un pescado con unas papas rústicas (eso, obviamente, viene por el lado de madre). A la mañana me avisaron (por mi pregunta) que la entrega del laburo puede ser el lunes (era hoy el deadline) así que estuve quedándome hasta tarde al recontra pedo pero BUEH, ya fue. Hoy a la mañana nos fuimos con Milo, padres y Pau al museo de Indianápolis, es grande y lindo y tiene algunas cosas interesantes aunque viniendo del Prado y habiendo ido a tantos museos en mi vida, un poco paso rápido. De todas maneras, el cuadro alusivo de Ker-Xavier Roussel me encantó (lo tendría contentísima en mi casa). Hacía mucho mucho calor. De ahí nos fuimos al downtown y comimos en un lugarcete bastante mediocre en cuestión alimenticia pero agradable. Cada vez que estamos con padres se habla mucho de política. No en el almuerzo pero sí en el desayuno, ponele. Yo, bueno, tengo fama de vehemente...creo que lo soy. Aunque también puedo ser encantadora (???). Ahí sí que pareciera ser la única que lo cree. Pasamos por una juguetería progre y padre le regaló un juguete a Milo, una suerte de cortadora de pasto, bah, un coso que hace ruido y tiene colores que no estaría soltando y viene a demostrar que no solo gusta de jugar a cocinar (aunque a las 7am empezó a gritar: mi cocina, mi cocina, dormido; si el pibe no se vuelve Adriá, estamos al horno con papas). Después padre y Pau llevaron a los kinder a la pile mientras yo hacía el equipaje y madre fue pero volvió arastrándose por la temperatura y la baja presión. Estoy teniendo unos dolores de cabeza infames pero no me quejo en la vida real. Bah, intento no quejarme de nada, believe it or not. La verdad es que Pau es la mejor anfitriona del mundo a todo nivel. Fueron unas vacaciones muy sentadoras y no tengo palabras de agradecimiento. Ahora ya tengo la cabeza en BA y en septiembre, cuando se me termine la joda viajera, veré qué onda.

En fin, volvemos en breve a la programación habitual. A las 8.10am sale el avión, por lo cual tenemos que estar dos horas antes (plomazo total) y salir de acá a las 5 y cacho. Viajar sola con los tres es un beishon pero ni modo, política de no complain. Fui con padres a CVS a comprar unas lechitas, unas galles, una coca y madre me compró unas cremas (a veces me compra unas carísimas pero a mí no me da para ver ese gasto...me quedé con ganas de un camisón bien de putita pero todo no se puede; fue un viaje de ser muy hija).

Bueno, guys. Los veo tomorrow.
Así las cosich.

No hay comentarios.: