sábado, 27 de marzo de 2010

kindergarten

En mi casa, lo sabemos, siempre hay gente. Y, principalmente, niños. Hoy no fue la excepción. Después de la depi defi que tanta felicidad nos dio, vinimos a comer con Pau a casa. Pau e hijas. María había llevamos a los chicos al club y cuando volvieron se quedaron también Feli y Juana. Entonces, niños y bebés. Comida, charla de chicos, boggle.  Ahora Roberta llora y yo la quiero regalar. Tenemos pelis para ver, la única alegría. Difícil lidiar con tantos hijos. Estoy cansada. Tengo sentimientos raros a veces.  Nostalgia. Pienso en Buenos Aires. Voy a buscar mi pasaje para junio. No termino de decidir si llevo al bebé o no. Ya veré. Necesito ir. Extraño. Me gusta ir sola, la paso increíblemente bien. No me interesaría ir sola a ningún otro lado. La nota de la escuela de Francfort la abrí ayer temprano, sigue a medio leer. No sé si escribir o leer libro. Voy a buscar algo de música.
Igual estoy bien, eh. Bastante contenta. Para mi estilo.
Así las cosas, chicos.
Findex de suburbio. Once again.

No hay comentarios.: