ni por asomo

digamos que es una frase literal. por qué sigo escribiendo esta mierda? porque no tengo nada mejor que hacer? seguramente.

el sábado no salí de casa. para nada. en todo el día. die, muy amorosamente, me fue a comprar al city las galletas con chocochips que se me antojaron. podrían ser como las que hago yo sólo que en lugar de duras les quedan arenosas. ricas. tomamos té y miramos pelis todo el día.

ayer sólo fui un ratito al super. hice una salsa de tomate y un pesto (siempre me queda demasiado salado). y comimos con unos amigos en casa.

últimamente nadie nos llama para hacer programas, esa es una realidad innegable. qué falta de popularidad, por dios. de todas maneras, tampoco yo quisiera mucho más. me duele mucho la cabeza, todo el tiempo. el remedio mágico se terminó y no pienso volver a comprarlo por una simple cuestión: es carísimo.

y hoy, fui un rato a la oficina, no pude resolver todo lo que debía y volví a casa para no hacer nada. me pregunto qué estará pasando en el mundo y yo acá, en la cama, perdiéndomelo.

volví a pensar en qué debería hacer hecho. qué hubiera hecho si no hubiera quedado embarazada a los 23? supongo que tampoco nada, hay algo en mi naturaleza que...

sin embargo, por qué sigo pensando que hubiera querido ser actriz? de dónde carajo saqué eso, eh? digamos que, estudié letras y no sólo eso, la terminé. en fin.

por lo demás, eso, jaqueca, un poco de náuseas pero no tan terribles, leer un poco, vegetar otro y la sensación de impotencia extrema, completamente responsabilidad mía.

ah, no, de mi marido no sé nada hace horas. y mi mamá está mucho mejor y con mejor voz. y yo sigo queriendo tirarme en su cama, como cuando era adolescente y terminábamos de comer y nos tirábamos las dos media hora a mirar mirtha. porque tiene sus cosas pero es mi mamucha y cada vez que corto, por estos días, se me llenan los ojos de lágrimas.

así las cosas. la nada misma, una vez más.