martes, 4 de septiembre de 2007

un martes al mediodía

ya llevé a mis hijos al colegio, fui a la oficina, los busqué, comí con ellos y leí un mail que me dejó pensando.

roberta me habla mucho, pinta con marcadores en el sillón a pesar de mis advertencias y sobre todo tiene algo para decir. a veces soy injusta con ella, roberta es una nena bastante especial. con más carácter del que uno esperaría y yo con poca paciencia. a veces siento que es tan diferente a mí que no la reconozco. una suerte de extrañamiento materno inexplicable. pero ella es así, más inteligente que la media aunque pocos se den cuenta, juega sola y canta y dibuja y siempre se inventa una actividad. se crió con mi mirada desplazada, al menos en relación a simón. nunca vivió en departamento y la plaza es donde pasa sus tardes desde que nació. le encanta comer fruta y yogur y cuando me distraigo se come todos los dulces que encuentra y suele empacharse.

simón armó una valijita con porquerías y anda por ahí. en un rato tengo que llevarlo a natación y tenis. antes tengo que cambiarme para hacer gimnasia yo también. necesito seguir con la disciplina.

simón es un chico con una luz especial, a todos conoce, a todos saluda, habla sin parar y es un nene bueno y cariñoso. a veces no puede lidiar con la frustración pero yo a los casi 30 años tampoco, sólo espero que no sea como yo.

a los dos les encanta que les lea a la noche y a mí, aunque me cueste vencer la incercia, también me da muchas satisfacciones.

no soy una mamá con paciencia, no soy una mamá a la que le guste jugar y no soy una madre demasiado flexible. como todas, soy una madre que hace lo que puede, lo mejor que puede y que no se imagina una vida sin ellos.

1 comentario:

Ximenius dijo...

Y si, solo podemos hacer, lo que podamos...ni mas ni menos, alguna vez una gran amiga me dijo que lo unico que trauma a los hijos es el abandono y el desamor. Eres una gran amiga y madre, y hoy estoy SUPER CURSI(alguien.....parenme..antes de que me ahogue en miel) jaja