domingo, 13 de diciembre de 2009

domingo noche

No salí de casa en todo el día. Dormí mal, para variar, los chicos se ocuparon del bebé un rato, se hicieron la leche y Diego, cerca de las diez, hizo un desayuno potente. Terminé mi libro en la cama, Milo hizo la siesta, después me bañé con Tita, ordené la casa y recién a la una, marido e hijos se fueron al super para completar compras. Asado en casa para nosotros solos. Una cantidad de carne desmedida. Comer mucho. Por suerte vinieron Feli y Juana con hambre, a las cuatro comimos parados en el tablón del jardín. Después abrí un paquete de trufas y aunque no me gustaron, comí demasidas. Lo estoy pagando con un persistente dolor de panza. Mientras los chicos jugaban, vimos Leonera. Sí, tenemos delay. Me gustó mucho. El libro que terminé, también. Mañana iré a comprarme alguno para el avión y alguno para Simón. Sigo sin resolver el tema regalos. Son casi las nueve, me quiero ir a la cama. No me importa nada. Mi hermana Marcela y familia ya está en Bs As. Mientras comíamos el exceso de carne, hablábamos de por qué no vivimos allá. No es sólo una cuestión de supervivencia económica. Es algo más. Esa presión. Difícil la ciudad. Mucha gente mirando qué hace el de al lado. A mí tampoco me pega bien. El bebé es divino. Miró la peli con nosotros. Estamos en plena cuenta regresiva. Tengo que armar mi agenda, por ahora poco programas. Bueno, los primero tres días, bookeados. Después veré.

Así las cosas.
Con un pie acá y otro allá. Casi como siempre, bah.

2 comentarios:

Daniela (Dalo) dijo...

Perdón por la curiosidad; ¿Pero que libro estás leyendo????
Pasala lindo por Buenos Aires y sé feliz... el resto viene solo. Besos y buen viaje. Daniela.

Cynthia dijo...

Hola, soy de Buenos Aires, hace poco descubrí tu blog y realmente me enganchó mucho. De alguna manera, ya me imagino a diario tu vida, tu familia, tu mundo y también me identifico cuando hablas de ciertas fobias, y el tema hijos y la dependencia que implican, etc (yo no tengo y no se si me animaría a tener) , aunque claro, habra mil cosas buenas que desconozco. Saludos