martes, 28 de diciembre de 2010

parada en una esquina

De Independencia, con mi mini vestidito amarillo y una Coca Zero me puse a leer porque tenía que hacer tiempo. Me concentré mucho, me sentí muy aparato y vi a más de una persona mirarme (no sé si era el efecto estridente del atuendo o el libro de parada) mientras pasaban. Antes hablé con el kioskero unos minutos, hasta que otro cliente nos interrumpió. Comentamos la diferencia de (in)seguridad entre México y Buenos Aires. Fumé un ciga y me puse a leer. Cuando crucé la calle, después de haber guardado el pequenio libro otra vez en la cartera, pensé en la belleza, fugazmente. No sé bien por qué. O sí, por algo que leí en Molloy. Pensé que mucha gente me dice "qué linda que estás"con sorpresa, pareciéndole que estoy más linda que antes y yo sé, porque lo sé, que en su cabeza tiene una imagen de menos linda de lo que soy (que NO SOY LINDA, eh, ni me lo creo) pero a la vez pensé que no tiene ninguna importancia y eso es real y está bueno.
A la maniana fui Uriburu 950 y no hice ninguno de los dos trámites que tenía que hacer por diversos motivos. Fue un shock terrible, no entiendo cómo sobreviví a la UBA por los miles de anios que estuve ahí. Me encontré con Lau y su cara de desorbitada era igual a la mía. Mon dieu. No llevé DNI y no había sistema. Y todos te tratan mal, lo que es realmente desalentador. Después caminamos por Santa Fe, hacía calor pero estábamos contentas. Entramos en el patio del Liceo pero era temprano y obviamente Maros no estaba pero sí sus cosas hermosas en vitrinas copadas. Cruzamos y nos compramos unos sandwichitos de miga y después buscamos dónde adquirir una coki. También entramos a Arredo y después a Mirona. Y así, como quien no quiere la cosa, caminamos hasta lo de padres. Lau está hermosa y parece joven. Y tiene esa sonrisa increíble. Después corrí a lo de Cris a comer con ella, Domi, Lalo y Acacia. Deliciosa sopa de pescado con langostinos y arroz. Acacia es una munieca. Milo se portó relativamente bien para su corta edad y todo fue ameno y super agradable. Me sentí protegida por un rato de la hostilidad. Ayer fue un día fatal, a marido NO LO VEO, lo extranio y pienso que sólo en Méx podemos ser juntos. Qué triste. No quiero pensar más en si volver o no volver, me agota.

Por otro lado, hechizos que se deshacen y me sorprenden.

Y no mucho más.

Maniana sigo, si puedo.

(desayuno con Oti, almuerzo con Miri, meriendo con Vir y salgo con las chicas: cartón lleno).

1 comentario:

Gemela Obscura dijo...

Volví y seré millones, pero ahora (muy) de incógnito.

Igual se me hace que me leés dos líneas y me ré sacás, pero shhh no le digas a nadie.

Extrañé leerte Juli, me identifico mucho con vos. Igual te leés cambiada, muy bien, y felíz (a pesar de. Qué loco no? cuántas contradicciones en la lejanía y la vuelta) en la madre patria.

Que lo disfrutes mucho, tu familia está hermosa!!

Un abrazo con la mejor onda.