lunes, 19 de enero de 2009

buuuuuuuhhhhhhh

El sábado, mientras brindábamos en lo de Lau, intentaron robar mi auto. La cerradura forzada y el auto abierto pero en su lugar, no sabemos por qué no se lo llevaron. Ahora salir del auto es una odisea porque para cerrarlo hay que hacer maniobras raras: me angustia. Josefa se fue el sábado a las diez de la mañana y todavía no volvió, no atiende su celular: me angustia. Ayer a la noche Diego hizo unos movimientos raros con un enchufe para poder ponerles un calentador a los chicos en su cuarto y dejó sin luz toda la parte de arriba de la casa, llamé al electricista pero tuve que dejarle un mensaje: me angustia. Tengo que ir a la psi a las once y media y es en la Roma, en una calle que no conozco: me angustia. Dormí muy mal, me quedé dormida en el sillón mientras Diego miraba Ocean´s Thirteen y fue una experiencia espantosa. El teléfono de mi cuarto hace un piiiiii horrible cada dos minutos porque se está descargando y no hay forma de evitarlo, me tuvo despierta desde las seis de la mañana. Y hace mucho frío para los estándares mexicanos.

Un poco quiero llorar. Odio los lunes así.

3 comentarios:

Obelix dijo...

qué lindo que estás escribiendo, jb.

JB dijo...

gracias obelix!!!!!!!!!!

ahí colgué foto de la panza...
beso

Morocha dijo...

Ju, qué pena, lamento muchísimo lo del auto.

Lo bueno: no estabas ahí, y si le ponemos más onda, no se lo llevaron.

Aunque entiendo mucho que la sensación de invasión no te la saca nadie.

Qué risa lo de tu esposo... cosas que pasan en una casa, sobre todo mexicana, donde las instalaciones eléctricas no son necesariamente la mar de buenas.

No sé si te levante el ánimo, pero tenés una panza divina... ah, y contrario a lo que leí por ahí unos posts más atrás, no me parece que estés gorda... nomás embarazada!! =)

Saludis y que todo salga bien