no sé si es porque soy la hija mayor de mi mamá (teoría que escuché de una dentista amiga de lisa), por cuestión meramente de personalidad y por miedo al rechazo pero soy de aquellas chicas que gustan agradar, que siempre tienen una sonrisa y la palabra justa para caerle bien a madres, abuelas, tías o cual miembro de familia (propia y ajena) toque.
no, no viene de la nada...resulta que vinieron la mamá y la abuela que vive en estados unidos, de lisa claro, a esto se sumó la suegra a quien no tolera e hicimos bingo...como a ella se le transforma la cara y yo no tengo nada mejor que hacer, pues quédate a comer (y yo que obvio no sólo no tenía nada preparado sino que siquiera había pensado) y acepté, obvio...entonces, ya sin la suegra, sostener un almuerzo en inglés con la madre y la abuela de lisa mientras lisa asentía a lo que decía su verborrágica abuela o simplemente se ausentaba mientras yo sonreía y contestaba...demás está aclara que estoy agotada, que simi está insopor mal, que llueve y que die no sé ni por dónde anda.
además, me llamó cris, la brasilera, que pasaba por wal mart y después venía para acá...hay alguna posibilidad de que le diga que no?
no
bueno, eso, roberta grita y simón me habla
será hasta luego
2 comentarios:
a mí me pasa lo mismo con las tías, abuelas y amigos de padres.
sí lau, ya sé, yo lo llamo sobreadaptación...
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