lunes, 18 de mayo de 2009

no me da ni el tiempo ni la cabeza, sabelo

Me levanté pensando ¿qué hice? Así, sin signos de exclamación, una duda sorda y real. ¿En qué me metí? No me da para esto, yo de verdad no quería tener hijos y ahora vivo cual ama de casa del suburbio, lavo ropita, corto calabacitas, pico ajo, salgo con la carreola, me baño, duermo una hora más porque no me alcanzó, claro que no y me siento a trabajar a las once y cuarto. Pero suena el teléfono y tengo que echar porras y decir, dale para adelante, está todo bien. No tengo resto. Marido angustiado, muchas cosas, nada interesante y toda la responsabilidad sobre él más los nervios que siempre le aparecen antes de un viaje (viaje que seguramente no traiga frutos, como suele suceder). El sentir que no me da la vida no está bueno pero a la vez intento recordad los días en los que me sentía al pedo, aburrida y sin objetivos. Prefiero estar sobre pasada y no ahuevada. Aunque desearía con toda mi alma no tener que ir a buscar a mis hijos al colegio.

Ayer volvió Diego del club y a mí se me había ocurrido salir, para orearse, distraerse, reencontrarse. La primera salida familiar solos los cinco, la primera ida de Camilo a la ciudad. Bañé y vestí hijos y a mí misma y cuando llega le propongo. Recibo una respuesta seca y mala onda. Lloro, me quiero matar, lo odio. Le digo todo lo que pienso. Su desconsideración, etcétera. Ahora me da pena, él también es humano y sufre y yo...a veces soy mala y nerviosa. En fin.

Tita no se quería levantar, todo difícil y la mañana demasiado gris, increíblemente gris e inesperada y pareciera que va a estar así por un buen rato. ¿Qué onda?

Bueno, finalmente fuimos a la feria de diseño de la Condesa, me compré un bucito colorinche como para imprimirle un toque de onda a mi vida y comimos en un puestito de ahí. Somos muchos y es difícil mover pero fue una salida corta y agradable y me gustaría que lo hiciéramos un poco más seguido. También me dieron ganas de vivir en la civilización y aunque sé que no lo vamos a hacer, me dio un poco de cosa tener tan poco contacto con la vida real.

En fin. Tengo que laburar sí o sí, media pila.

Mi hijo acaba de agarrar el chupón, buena medida, eso y la música romántica (no Cristian Castro sino Chopin y esa movida).

Bueno, chicos.

Así las cosas. Compliqueti.

1 comentario:

Ana Laura dijo...

Hola Jb, nunca comento pero te leo de siempre. (qué sopor pero es difícil evitar el speach de la primera vez). En fin, me genera mucho desconcierto el tema este de que afirmes categóricamente que no van a vivir en la civilización.
Qué te ata al suburbio? Además de, no sé, la plazuela.
Saludos