jueves, 3 de abril de 2008

hablamos, hablamos, hablamos

con pau. toda la tarde. comimos en casa, fuimos al club con los chicos, después a merendar a lo de ella y recién volvimos a las siete.

al menos logramos neutralizar el efecto angustia-aburrimiento-frustración que acarrean las tarden solitarias.

ahora, diego cocina con gastón y yo no dejo esta máquina del orto. desearía abandonar la adicción pero no tengo voluntad.

un poco me cansé de "la gente". esa que rompe los huevos y no pregunta jamás cómo estás. hay tanta.

en fin, parece que seguimos en pie de guerra. aunque si te encontrás conmigo sigo destilando buena onda, tal vez, sin querer, en algún momento sin darme cuenta escupo bilis (negra).

1 comentario:

Morocha dijo...

Hola! Cómo estás?? =)

Saluditos