una mañana de diciembre bajándome del 141 en rivadavia y puán, conocí a un sujeto mientras caminaba las 4 cuadras que separan la parada de la facultad...se llamaba aníbal, vivía en londres y tenía creo que 30 o algo así...yo y mis dulces 19 le dieron el teléfono de mi casa para que me llamara...al día siguiente salí con el pibe a tomar algo en donde era bier haus (síiiii, disculpen la antigüedad)...después de terminarme un inmenso capuchino (creo que lo más grave es que todo siempre lo hago sobria, ni siquiera puedo ampararme en los efectos de dorgas o alcohol) nos dispusimos a ir a un telo...el muchacho no tenía auto así que nos tomamos un taxi...la cuestión es que era viernes y estaban todos llenos..así que recorrimos varios con el taxista dándonos consejos...finalmente en el tercero decidimos esperar ya que la recorrida no daba para más...
en fin, terminé la noche en un jacuzzi colorado cantando canciones de los beatles...
me quedó un grato recuerdo, al chico no lo ví nunca más
obvio
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