miércoles, 16 de febrero de 2011

creo que es la primera vez en el año

Que le cocino a marido. Bife, ensalada, arroz con queso crocante. Tarta de elote (choclo) que había hecho Lupis. También le pelé un mango (no puedo ser más divine). No hice nada, bah. Pero decidí que cocinar no es para mí. Nada me hubiera gustado más que ser una handy person. Saber cocer, bordar, cocinar, tejer, limpiar y disfrutarlo. Una pena.

Me habla de trabajo, claro. Llegó tarde. Muy tarde para mi muy largo día.

Novedades: ninguna, chicos. Pasa poco cuando solo salís para ir al super. Pasó Pau con las chicas. Y leer leer leer. Hija un poco complicada de carácter. ¿Las hormonas empiezan a jodernos el carácter desde el minuto cero? Parece que no. Madre gusta mucho de decir lo buena, divina, amorosa y educada que supe ser en mis primeros años. Además de linda.

La adolescencia no fue un buen momento para mí. Más bien fue una mierda absoluta. Pero los años pasan y todo tiene otro cariz, otro prisma y al final, es un momento tan puro, tan de formación, tan cándido en un sentido que nunca se puede renegar.

Quiero irme a la cama.
Así las cosas.
Largas.

No hay comentarios.: