lunes, 5 de octubre de 2009

en la cuerda floja

Roberta está muy angustiada y hace lo imposible por llamar la atención. Ya nos enojamos y le gritamos y la castigamos ayer. Ya la contuve y me acosté y charlé con ella. Me deja siempre en falta. Por el otro wing, recibo el peor de los tratos continuamente. Vivo amenazada. No entiendo. Estoy agotada. A todo nivel.

Me pasé la tarde en el pediatra. Milo con la garganta colorada y tos. Simón con una tos de perro insostenible. Nada grave, sólo molestias. Yo también sigo sintiéndome mal, la garganta irritada como ellos. Y dolor de cuerpo. Y soledad. Me siento sola y triste. No merezco estar así día por medio.

Karina me cae bien, es alegre. A ver cuánto le dura en esta casa en la que parece que logramos marchitar cualquier cosa. No logramos acordar en nada.

Me voy a poner el pijama, meterme en la cama y leer un rato antes de dormir. Diego tiene la televisión prendida (con el volumen alto) en la sala de tele y al mismo tiempo checa la edición de un concierto en la computadora, así cualquiera tiene la cabeza quemada.

Así de entristecidas las cosas.

1 comentario:

M. dijo...

un ratito pensá en cosas lindas. hacete la imagen para que se haga la realidad.
te mando luz de primavera de buenos aires.
y disfrutá tu mexico.