martes, 17 de febrero de 2009

por eso y otros temas

El embarazo, para mí, es un estado de suspensión. No soy yo. Me vuelvo gorda, casi no cojo y me siento como el orto durante demasiados meses. Pensaba, justamente, en coger. La verdad es que coger con panza me tienta cero y a la vez, me la paso teniendo fantasías. Tocarse. Está tan lejos de la imagen de madre de familia. Claro que no soy yo pero sí soy yo. Siempre. Aunque esté gorda y no me den ganas de garchar. Inmanencia. Es que leí el cuento de Terranova. Y estoy aburrida. Y hay sol y tengo que bajar a buscar agua para tomar la media pastilla. Y no tengo muchos planes y el libro no me atrapa y debería escribir, claro, debería pero no escribo. Y mi marido está lejos y mi madre no volvió de llevar a los críos y estoy atornillada a la cama, frente al vicio blanco. Dios, soy un desperdicio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

sexy sexy sexy

cada vez más sexy.