sábado, 7 de agosto de 2010

Sábado, tarde, diluvio, fiaca

Llego del club con los chicos. Marido se quedó haciendo sauna después de largo tenis. Estuvo bien el día aunque compartí la mesa con gente que dice *en la guerra del 76*,  gente que para colmo nos cae bien.
A las 5am vino Juana a decirme: *Juli, me quiero ir a mi casa*, le dije que se trajera la bolsa de dormir al lado de mi cama y se planchó al toque. Yo, en cambio, me pasé 45 minutos padeciendo dolores de panza infames. Pensé que había buscapina pero no, me clavé un reliverán sublingual, fósil de algún embarazo y finalmente seguí durmiendo. Me había acostado a las 2.30 después de larga, rica y divertida cena en la que se tomó mucho alcohol (excepto panza y yo que no probamos). Marido, de hecho, se emborrachó mal con el exceso de vino y vodka puro y a las 2 se puso a mover un mueble para poder acomodar la tele nueva que había comprado horas atrás, haciendo que lo odiara por el tiempo que le tomó. De todas maneras, a la madrugada, completamente inconciente de sus actos, me putió cuando intenté disuadirlo de la movida. Hoy a la mañana me pidió perdón.
En otro orden de cosas, qué bien me pegan los buenos polvos mañaneros.
El lenguado vuelta y vuelta con un poco de ajo a marido le quedó genial, el camambert frito también. A mis papas a la crema les sobraba medio litro de grasa pero igual no fallan. Y las paletas bañadas en chocolate que trajeron los chicos, estaban muy bien. Nos reímos mucho, de nosotros mismos, obviamente. También vino Ale que por suerte logró sumarse a último momento. A veces me da pena que en este blog no se note que lo único que me sobran (además de kilos) es sentido del humor. Pero bueh, todo no se puede. Al rato veremos una peli. Me invade una fiaca estructural, lluviosa y penetrante pero sin bajón. La pura fiaca. Creo que cada vez hablo más mex y ya no encuentro la traducción argentina para ciertos términos. Preocupante. Intenté hacer ejercicio en mi zona (70% de la capacidad cardíaca para quemar grasa) pero no me alcanzó la energía. Mientras pensaba en la gente que no da. ¿Viste esa gente que simplemente es chota y uno tiene que tener lejos? Bueno, en esa. Después me reí con mails de amigas históricas que no tienen control ni filtro. Y acá estoy, por ir a tirarme en la camuch a leer mientras bebé duerme y marido aún no llega.
En fin, guys.
Así las cosas.
(tengo mucho diario digital pero esto de no poder transportar la compu tiene sus grandes desventajas).

1 comentario:

merd dijo...

que buen blog!! lo disfruto todos los dias, tan identificada me siento a veces
gracias!