sábado, 7 de noviembre de 2009

¿qué me estás pasando?

No, las tetas ya (no) me crecieron hace mucho.

Pero ya no soy yo. Por muchos motivos. De repente, tomo distancia y me pregunto cómo aguanté todo este tiempo. Corrijo: ¿cómo aguanto?

De todas maneras las dudas se acrecientan cuando salgo, vamos a cumpleaños en la condechi. No me cambio, me pinto levemente, me abrigo por el famoso frío puto, llamo a Jacoba porque me da muchos nervios dejarlos por primera vez y me pongo las pilas. Buena onda. Tiro la buena, soy simpática. Veo mucho gente que conozco de hace años y hace años también que no veo. En realidad, ellos me reconocen, yo no. Desesperante. Ya dije muchas veces la hueva que me da la gente que se hace la que no te conoce. Forros. Y yo, que tengo que andar pidiendo perdón. Me pasó con seis personas. Too much. Perdón, perdón, estoy quemada con tantos hijos. Dios mío. Intenté bailar, nadie ponía música y no había volumen pero igual, me saqué las ganas de noche. Volvimos temprano. Hablar en las fiestas me pone mal, me quiero ir rápido.

Está bueno ventilarse. Está bien que urge hacer un cambio. Está bien darse cuenta de que necesito laburar de verdad, salir de mi casa.

Está perfecto que sea sábado!

Al rato nos vamos a un cumple en un lugar cerrado, feo pero abrigrado.

Así de salidoras las cosas.

No hay comentarios.: