lunes, 23 de noviembre de 2009

y se terminó por fin

Vi seis temporadas en no sé cuánto tiempo pero asumo que poco. Carrie me parece una imbécil, esa es la verdad. Nadie que escriba una columna en un diario se puede llamar a sí mismo escritor. Nadie que sólo lea Vogue. Increíble.

Si me preguntás, me siento una mezcla entre Miranda y Charlotte. God.

Pero reconozcamos que me dio grandes alegrías. Entretenimiento y escapismo, como dice Domitila. Y una buena dosis de ganas de vivir en la ciudad nuevamente.

Por lo demás, Camilo- o mejor dicho yo- lidia con la angustia de los ocho meses adelantada, cuatro dientes que parece que le están por salir (colmillos, no se entiende), una hija que dentro de todo se porta medianamente bien pero no tiene muchas actividades extraescolares, un hijo mayor que hace la tarea pensando en cualquier cosa, no se concentra demasiado y es mediocre cuando debería ser excelente (lo sé, lo sé, sí, soy una madre rompehuevos y exigente. I know).

Trabajé poco y ahora veré si bajo a la ciudad o me gana la fiaca.

Así las cosas, chicos.
Todo concluye al fin. Hasta Sex & the City.

1 comentario:

Vivi dijo...

coincido
no soporto a carrie tampoco