El calor es otra cosa. Le dije chau a las botas y me puse mis chatitas nuevas, floripondias, veraniegas. Hola primeravera, no te hice ni un poco de fiesta.
Tomé café con Gaby a la mañana, después de patinadora, sauna, super (muuuucha fruta porque marido quiere hacer vida sana así que le pedí a las chicas que la cortaran para que se la lleve de lunch y verdura al por mayor). Después comí con Jess en el Non solo de Polanco y volví preguntándome si soy de verdad un enorme talento desperdiciado o me sobreestimo muy por demás. Igual: la autocondescendencia es todavía peor que la exógena. Whatever. Estoy de buenas, muy adentro mío. El pobre Milo se sigue sintiendo mal y está bastante insopor. Chateo con madre y hablamos de viajes. A la noche ceno en el Lampuga con marido y talento. Y así se va pasando la vida. Mañana curso y el finde...no sé. Deberíamos irnos a la playa. Necesitamos estar los cuatro solos, un poco de mar que cura y limpia y despeja pero es demasiado esfuerzo para pocos días y al fina no nos hace TAN felices irnos de casa. Somos así de limitaditos.
Bueh. Me pongo a laburar de una buena vez, después de buscar a Titi en Ballet.
Así las cosas!!!!!!
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